Los precios del café en Estados Unidos se han disparado en el cuarto trimestre de 2022, y algunas de las marcas más vendidas de café tostado y molido han experimentado un aumento de hasta el 50%. Esto es según un nuevo informe de investigación de Rabobank, que encontró que los precios del café en todas las categorías aumentaron en promedio casi un 20%, lo que llevó a una caída del 5% en los volúmenes vendidos.
Aumento de los costes del café en grano
Las fuertes subidas de precios se debieron al aumento de los costes del café en grano, la mano de obra, la energía y el envasado, ya que las empresas intentaron compensar estos costes y mantener sus ingresos. La mayor subida de precios se observó en la categoría de café tostado y molido, atribuible en gran medida al alto porcentaje de café verde que compone el coste total.
Reducción en la producción de café verde
Los precios del café verde han subido debido a la drástica reducción de la producción de Brasil -primer productor mundial de café- como consecuencia de las heladas. En 2022, los precios alcanzaron su nivel más alto en 11 años, lo que dificulta a las empresas mantener sus márgenes.
Jim Watson, director ejecutivo de Investigación de Bebidas de RaboResearch, lleva 16 años en el sector y nunca había visto una subida de precios tan grande. Cree que la presión de los costes seguirá siendo alta en 2023, aunque se espera que los precios del café verde desciendan ligeramente respecto a los niveles actuales.
EEUU, el mayor consumidor de café del mundo
EE.UU. es el mayor consumidor e importador de café del mundo, y los elevados precios han tenido repercusiones de gran alcance para las empresas de todo el país. Mientras que el aumento del 50% en el caso de Folgers provocó una reducción del 17% en los volúmenes vendidos, otras marcas conocidas como Maxwell House y Starbucks consiguieron aumentar sus precios un 35% y un 15%, respectivamente.
Sin embargo, no son sólo las empresas las que se resienten de los altos precios. Los consumidores también se han visto afectados, ya que el precio medio de una taza de café ha pasado de 1,50 a 2,25 dólares. Esto ha empujado a mucha gente a optar por otro tipo de bebidas, como el té o los refrescos, aunque la demanda global de café sigue siendo fuerte.
Los elevados precios del café también han repercutido en la economía estadounidense. El coste de producción del café ha aumentado, lo que se ha traducido en precios más altos tanto para los consumidores como para las empresas. Esto ha provocado una disminución del gasto y un menor ritmo de crecimiento económico.
Conclusión
En conclusión, los elevados precios del café en Estados Unidos han tenido repercusiones de gran alcance para las empresas, los consumidores y la economía en su conjunto. La subida de los precios del café se ha debido al aumento de los costes del grano, la mano de obra, la energía y el envasado, ya que las empresas intentan compensar estos costes y mantener sus ingresos. A pesar de la subida de precios, la demanda global de café sigue siendo fuerte, aunque los consumidores han tenido que cambiar a otro tipo de bebidas debido a los precios más altos. Aún está por ver cómo se verá afectada la economía estadounidense por los altos precios del café, pero está claro que la situación dista mucho de ser ideal.
